Cuando viajamos tenemos múltiples opciones para elegir alojamientos, aunque por costumbre el alojamiento más visitado son los hoteles, tal vez por la privacidad, por los servicios, confort o simplemente la rutina al escoger alojamientos.
Existen prejuicios a la hora de elegir habitaciones compartidas, ya sea en hostel, guest house, o cualquier otro tipo donde podamos tener compañías desconocidas en el mismo cuarto. Hablar sobre compartir habitaciones con desconocidos es cuestión de largas conversaciones y con muchos estereotipos que se han ido formando, aunque ninguna cuestión es certera o falsa, ya que cada experiencia es diferente.
Después de la experiencia vamos a resaltar punto favorables e inconvenientes que se puedan dar a la hora elegir un alojamiento con habitaciones compartidas.
Uno de sus puntos fuertes es el económico, pues compartir habitaciones y baños siempre suele una recompensa en nuestros bolsillos. Pues cuando viajamos con frecuencia, normalmente, no nos podemos permitir gastar demasiado en alojamiento, o deberemos de reducir el número de salidas/escapadas/viajes.
Pues por otra parte, debemos tener en cuenta que cuando viajamos la habitación es el espacio donde menos tiempo ocupamos, por lo que ahorrar en este aspecto puede ser beneficioso para quien quiere realizar más viajes aunque nuestras comodidades sean menores.
Conocer a gente de todas las partes del mundo es otra de las ventajas con la que contamos al viajar en este tipo de estancias, pues los espacios comunes incentivan a la comunicación entre viajeros frente a al tradicional hotel.
El aprendizaje es otro de los factores que debemos resaltar, compartir actividades y disfrutar de la multiculturalidad nos esnseñará nuevas experiencias, recibiremos más información de sitios que no aparecen formalmente en las guías, así como obtener nuevas ideas son beneficios, que culturalmente, ganaremos.
Contiene más espacios comunes de lo que pensamos y le damos más uso que en el alojamiento tradicional, bien sea por su coste gratuito, su bajo coste, o simplemente por compartir experiencias con otros viajeros. Desde talleres de cocinas, yoga , salidas o excursiones, sala de video o lectura, o como la parte más de ocio, o de juegos son con las que, habitualmente, podemos contar.
Suelen contener cocinas propias donde preparar nuestra propia comida, y sabemos bien que cuando viajamos mucho dinero se nos va en este aspecto, en comer. Pues es otro de los mecanismo de ahorro, cocinar en la cocina del hostel.
La informalidad puede ser un punto ambiguo de este apartado, pues puede llevarnos a desesperaciones o a tomarnos desde otra actitud la situaciones, así que si acudes a estos tipos de alojamientos ve con la mente abierta, y tomate la vida con más calma.
Una vez puestos algunos de los puntos favorables más importantes también debemos de hablar de algunos inconvenientes de compartir espacios.
El punto más importante como inconveniente es la privacidad, pues compartir espacios conlleva una pequeña perdida de nuestra privacidad, pues prácticamente en todos los espacios suele haber gente.
Como segundo inconveniente y final es la perdida de comodidades, desde compartir baño, que incluso tienes que cargar con tus propias toallas o gel y champú, o tener que contar en tu neceser con mascara para dormir, o tapones para los oídos para aminorar los perjuicios que puedas sufrir mientras duermes.
Seguramente pueda haber más puntos que se puedan destacar, como el riesgo a la perdida/sustración de bienes, típico estereotipo de las personas que no frecuentan este tipo de alojamiento, pero mi teoría sobre ello son dos cuestiones principales. La primera, no es otra que, normalmente estos alojamientos cuentan con taquillas en las que puedes guardar tus bienes más valiosos, y por otro lado, es que normalmente, las personas que frecuentan este tipo de sitios están en las mismas condiciones que tú, por lo que normalmente no suele suceder nada, lo que no implica que no pueda suceder, por lo que quienes debemos de tener cuidado con nuestras pertenencias somos nosotros y nosotros mismos. Además y como recomendación viaja con lo necesario, cargar con mucho para no usuarlo no tiene sentido.
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